Fin del Partido

Aquellos labios que rose, jamas los volví a sentir, y sus miradas las esquive, no permitiría que una vez mas la pasión y su destreza me cautivaran de nuevo.

No a mi, no otra vez, puse fin a ese partido, tu en tu equipo yo en el mio, tiempo fuera y nadie anoto; por un instante estuviste a la defensiva esquive tu intensión y el reloj el conteo acabo.

No se trata de que perdiera uno o perdieran los dos, se trata de que el capricho se entrometió. No hubo espacio para el carisma pero si para la aberración, no basto la mentira pero tampoco valió el perdón.