Más que una metáfora, es una realidad, sólo que nos hemos habituado a creer que el centro de nuestra vida es el cerebro, sin embargo, se ha descubierto que el corazón tiene cerebro, un sistema nervioso independiente, con una 40.000 neuronas y compleja red de neurotransmisores. Con estos elaborados circuitos, el corazón envía más información al cerebro de la que recibe, puede recordar, aprender, percibir, y hasta anular determinadas partes del cerebro según la ocasión. Usar el cerebro del corazón nos trae como beneficios una coherencia biológica, armonía, paz y equilibrio. Es decir, el corazón hace mucho más que bombear sangre, piensa, intuye, y aprende, esto es algo que aún está en discusión a nivel científico, pero para los fines de este artículo, hemos decidido creer en estos estudios. Vivimos creyendo que somos una entidad separada de nuestra psique, cuerpo y emoción, sin embargo, todo lo que acontece impacta en esta tribología, a nivel orgánico, psíquico y cerebral, y se